No siempre tenemos la razón, y tampoco siempre cuando callamos es por que aceptamos que no la tenemos.
El motivo de callar más grande será conservar la paz.
Tratar de demostrar a quien no tiene la razón que no la tiene,puede ser en muchas ocasiones más dañino que cargar con una culpa que no nos pertenece.
Hay quienes me sorprenden todavía con grandes dosis de odio en su corazón, quienes cambian su paz por rabia,y cierran su entendimiento y escogen sólo arder en mal humor.
Es una grandisima mala decisión y a veces ni el tiempo logra demostrar que se han equivocado.
Pero sobrevivo a todo sólo asistida por mi verdad y bendecida por ángel de la guarda.
Me confieso culpable de tratar de cumplir con mis pactos religiosos a un alto costo y cargaré con la culpa de ser y hacer lo que corresponde, lamento que el serlo afecte la paz de otros,lo que no es mi intención y puedo demostrarlo ya que tengo un gran testigo: Yemayá! .
Me encanta su blog. Mucho Ache para usted Mayor.
Y también puede ser,..que uno/na sea el *rey de los catetos” o “reyna de las catetas”?..-Y también puede ser que uno/na sufra de inhibiciones inexplicables que no tienen validez alguna para la época en la que vivimos?..