En tiempos pasados, ahijados y padrinos vivían cerca, el ahijado pasaba todos los días a saludar a su mayor, Iyaboces saludaban al ángel de la guarda de donde nacieron, ayudaban a su mayor en cualquier cosa, y en silencio, sin preguntar, escuchaban a los mayores hablar de esto, de aquello y así se trasmitía el conocimiento. Incluso, algunos se quedaban largos tiempos en casa de la madrina o padrino… En muchos casos eran familiones, tíos, abuelos, primos, esposos, esposas, hijos. Tenían entre sus familiares, santeros, olúos, obbases , paleros, abakúases(no se si esta bien escrito).
Los más viejos eran ultra respetados, nadie ni siquiera levantaba la voz, para preguntar mucho menos para contradecir.
Todos nacían dentro de la religión, era su cultura, su identidad!. Había amor en las manos del que ripiaba una yerba, había amor en las manos del que «raspaba» ese santo!
Se tiraban brujeria, si! Pero hasta enemigo con enemigo tenían RESPETO!
Hemos perdido tanto! Lo perdido no se puede recuperar.
Regla de Osha Cubana está desapareciendo, no hay ética, no hay conocimiento, no hay amor!
